Les
comparto el presente video, el cual nos invita a compartir una mirada de la
espiritualidad del Carmelo; fijamos la atención en concreto, en estos santos
doctores de la Iglesia y bien acogidos en otros ámbitos religiosos y
culturales, los cuales fueron caminantes.
La
mística es un viaje y el místico es un viajero. Viajaron sin mapa. Su única
brújula fue la fe oscura o si se prefiere la confianza ciega.
Los
Santos del Carmelo han hecho un camino de aprendizaje. Han aprendido a ser
hombres y mujeres de verdad. Con sus equivocaciones y aciertos, con ayudas que
han encontrado, y falsas ayudas que les han dado. Han hecho un discernimiento
conjugando tres cosas: la propia reflexión, la oración y la ayuda de los demás.
No
se han callado lo que han descubierto. Han inventado lenguajes nuevos para
decir cosas nuevas. Lo han gritado por los caminos. “¿Qué amor es ese que no
siente la necesidad de hablar del ser amado?” (EG 264) .